Truco para llevar la pasta en tupper. Salsa de tomate y ricotta

   Si desde hace unos años llevar el tupper de comida al trabajo "está de moda", con los tiempos que corren es casi un imprescindible. Y la pasta es un plato de lo más socorrido, además de barato. No todos los días apetece prepararse la comida para el día siguiente, se acaban las ideas, no hay tiempo...

   Pero llevar la pasta en tupper tiene un problema. Lo que preparas por la noche con muy buena pinta, al día siguiente es un plato pegoteado y reseco. Por eso os quiero contar mi truco. Hace unos meses lo escribí en Twitter y gustó mucho, así que pensé que a alguien más le podía servir si lo publicaba en el blog.

   No es que la pasta quede como recién hecha, para eso no hay truco. Pero (que me perdonen los puristas) es un apaño bastante bueno y nos permite comer un plato de pasta más que decente en la oficina.

   Y de paso, os enseño una salsa muy socorrida y muy rica. La base, tomate y ricotta. Le podemos poner un poco de pollo, cebolla pochada... y estará más rico aún, pero para unas prisas salsa de tomate y un par de cucharadas de ricotta, una pizca de pimienta, ¡y marchando!

Truco para llevar la pasta en el tupper:

   La cuestión es la siguente: si metemos la pasta caliente en el tupper, se sigue cociendo: la pasta se pasa, y de mientras absorve todo el agua que puede de la salsa. Conclusión: la pasta está requete-pasada y la salsa requete-seca.

   ¿Cómo remediarlo? Pues no metiendo la pasta caliente en el tupper. Fácil, ¿verdad?

   - Cocemos la pasta de forma normal, un minuto más de lo que la tendríamos para comer en el momento, ya que vamos a enfriarla para parar la cocción.

   - Escurrimos la pasta y la pasamos a un colador, que ponemos bajo el chorro de agua fría. Cuando se temple, la dejamos en el colador, que se escurra, y que se enfríe del todo. Luego podemos ponerla en el tupper.

   - Preparamos la salsa de la forma normal y la dejamos enfriar del todo. 

   - Si no nos importa llevar dos tuppers, perfecto. Para calentar, salpicamos unas gotas de agua en la pasta para que se suelte, y la calentamos. Calentamos también la salsa aparte y las mezclamos en el último momento.

   - ¿Quieres llevar un sólo tupper? Espera a que las dos partes estén frías del todo antes de juntarlas. Yo cuando lo llevo así ni siquiera lo mezclo. Pongo la salsa sobre la pasta, cierro, y al bolso.

   Ya me contaréis si notáis la diferencia.

Salsa de tomate y ricotta:

Ingredientes:

   - Un vaso de salsa de tomate

   - Dos cucharadas grandes de queso ricotta o requesón

   - 1 filete pequeño de pollo (opcional)

   - 1/2 cebolla (opcional)

   - Una pizca de sal

   - Pimienta negra, una pizca de orégano.

Cómo preparar la salsa de tomate y ricotta:

   Parte opcional: Picamos la cebolla y la pochamos en una sartén con un hilo de aceite de oliva y una pizca de sal. De mientras troceamos el pollo en dados. Cuando la cebolla empiece a estar tranparente, añadimos el pollo salpimentado y damos unas vueltas hasta que tome algo de color.

   Añadimos a la sartén un hilo de aceite (si no hemos hecho el paso anterior) y cuando se temple incorporamos la salsa de tomate. Una pizca de sal, un poco de pimienta recién molida y orégano y dejamos un par de minutos haciendo chup-chup.

   Retiramos del fuego, añadimos el queso ricotta y removemos hasta que se disuelva del todo. ¡Y al tupper!