Käsespätzle. Bajo este nombre tan raro se esconde un plato tradicional austriaco que no falta en ninguna fiesta, feria o estación de esquí. Se lee algo así como Quese-espechle y es uno de esos típico platos austriacos perfectos para combatir el frío invierno... pero que te comerías con sus 5000 calorías en cualquier momento del año.
Los Spätzle son una especie de Ñoquis hechos de harina, huevo y agua. Luego se les añade queso y cebolla frita, o bacon y verduras... Los suelen preparar en sartenes enormes en las fiestas, con toneladas de queso fundido... es un vicio.
También es muy típico servirlos como guarnición, esta vez sin el queso. Acompañando un plato de goulasch o cualquier plato de carne con salsa.
También es muy típico servirlos como guarnición, esta vez sin el queso. Acompañando un plato de goulasch o cualquier plato de carne con salsa.
Así que desde que llegué a vivir a Austria, estaba deseando prepararlos. Enseguida me compré la herramienta para hacerlos, pero no terminaba de lograr que la masa me saliera bien. Cada receta que leía tenía unas cantidades diferentes, y aquello nunca salía bien... así que "el cacharro" quedó en el fondo de un cajón durante meses. Hasta ahora que una compañera de trabajo me ha dado la receta de su madre, que se los prepara a menudo... y ha sido todo un éxito.
Es una pena que para prepararlos haga falta algún tipo de utensilio. El más sencillo es como el mío: una tapa de metal con agujeros de medio centímetro de diámetro. Se coloca directamente sobre la cazuela, se ponen un par de cucharadas de masa sobre ella, se aplasta con la rasqueta y caen al agua hirviendo. Los hay más sofisticados, como una especie de mandolina que va raspando la masa sobre el "rallador" o tipo prensa. Si no podéis conseguir algo parecido, siempre se puede hacer con un colador de agujeros grandes, un pasapurés, o un rallador grueso, o apañar un invento similar en casa... Su de Webos Fritos los hace con una jeringa gigante... ¡Imaginación al poder!
Hay un montón de masas diferentes, esta esta es la más básica. Y la receta con queso y cebolla frita, también la más sencilla de preparar. Lo ideal es freír mucho la cebolla en abundante aceite muy caliente hasta que quede dorada y crujiente. Pero se puede hacer perfectamente con cebolla ya frita, como la que venden en Ikea.
Y sobre el queso, uno fuerte, aromático, Emmental, por ejemplo. Es importante que sea fuertecillo y que funda bien. Aquí se prepara con Bergkäse, literalmente queso de las montañas, un queso apestoso y tierno, de lo mejorcito que tienen por aquí. Lo hay de varios tipos distintos, pero para unos buenos Käsespätzle, lo importante que sea aromático y que funda bien.
Y sobre el queso, uno fuerte, aromático, Emmental, por ejemplo. Es importante que sea fuertecillo y que funda bien. Aquí se prepara con Bergkäse, literalmente queso de las montañas, un queso apestoso y tierno, de lo mejorcito que tienen por aquí. Lo hay de varios tipos distintos, pero para unos buenos Käsespätzle, lo importante que sea aromático y que funda bien.
Os prometo que desde que me he puesto a preparar la comida hasta que ha estado el plato listo no han pasado ni quince minutos. ¡Es facilísimo!
Ingredientes (2-3 personas):
Para los Spätzle:
- 300g de harina
- 3 huevos
- Una pizca de sal
- Una pizca de nuez moscada
- 180ml de agua fría
Por encima:
- 200g de queso fuerte, tipo emmental
- Cebolla frita
Cómo preparar Käsespätzle:
- 300g de harina
- 3 huevos
- Una pizca de sal
- Una pizca de nuez moscada
- 180ml de agua fría
Por encima:
- 200g de queso fuerte, tipo emmental
- Cebolla frita
Cómo preparar Käsespätzle:
Mezclamos todos los ingredientes de la masa, hasta lograr una papilla pegajosa.
Por otro lado, ponemos una cazuela grande con agua con sal a hervir. En mi caso la que tiene el tamaño de la tapa para hacer Spätzle.
Rallamos el queso y precalentamos el horno a 200°.
Cuando el agua rompa a hervir, vamos haciendo los Spätzle por tandas, ya que en unos segundos suben a la superficie flotando, y ya están hechos: Ponemos un par de cucharadas generosas de masa sobre la "tapa con agujeros" para hacer los Spätzle y con la rasqueta de plástico vamos raspando la masa sobre la superficie para que vaya cayendo a trocitos sobre el agua hirviendo.
Con una espumadera los sacamos del agua, escurrimos bien y los ponemos en una fuente de horno. Cuando tengamos una primera capa de Spätzle, cubrimos con queso rallado.
Vamos repitiendo el proceso hasta que terminemos con toda la masa, poniendo bien de queso entre cada capa de Spätzle.
Cubrimos los Spätzle con una última capa de queso y metemos al horno un par de minutos hasta que se funda el queso de encima.
Otra manera de hacerlo sería poner todos los Spätzle ya cocidos en una sartén grande, añadir todo el queso y mezclar hasta que se funda. Este método es mejor si no vamos a comerlos justo en el momento de cocerlos.
Servimos bien caliente, decorando con una buena cantidad de cebolla frita por encima.
Por otro lado, ponemos una cazuela grande con agua con sal a hervir. En mi caso la que tiene el tamaño de la tapa para hacer Spätzle.
Rallamos el queso y precalentamos el horno a 200°.
Cuando el agua rompa a hervir, vamos haciendo los Spätzle por tandas, ya que en unos segundos suben a la superficie flotando, y ya están hechos: Ponemos un par de cucharadas generosas de masa sobre la "tapa con agujeros" para hacer los Spätzle y con la rasqueta de plástico vamos raspando la masa sobre la superficie para que vaya cayendo a trocitos sobre el agua hirviendo.
Con una espumadera los sacamos del agua, escurrimos bien y los ponemos en una fuente de horno. Cuando tengamos una primera capa de Spätzle, cubrimos con queso rallado.
Vamos repitiendo el proceso hasta que terminemos con toda la masa, poniendo bien de queso entre cada capa de Spätzle.
Cubrimos los Spätzle con una última capa de queso y metemos al horno un par de minutos hasta que se funda el queso de encima.
Otra manera de hacerlo sería poner todos los Spätzle ya cocidos en una sartén grande, añadir todo el queso y mezclar hasta que se funda. Este método es mejor si no vamos a comerlos justo en el momento de cocerlos.
Servimos bien caliente, decorando con una buena cantidad de cebolla frita por encima.
hace años me regalaron un juego de cocina y te puedes creer que venía con ese utensilio? Y yo pensando que era para escurrir la pasta!!! jajajaj creo que el juego es de una marca alemana. Tendré que animarme a hacerlo, no?
ResponderEliminarjo qué ricos!!! se me hace la boca agua. Es injusto verlo a estas horas, snif, jajaja
ResponderEliminarSalu2. Paula
Dios mio!!!! Es una pasada, me encanta este plato! Eso de los utensilios vamos a dejarlo que ya no sé dónde guardas tantos y en casa me van a echar como lleve algo más, así está bien aprovechar lo que se tenga a la mano.
ResponderEliminarUna delicia de receta. Besos
No los conocía, pero viendo los ingredientes seguro que me gustan. Apunto para probar un día.
ResponderEliminarun beso.
Ah, pero por aquí los Käsespätzle no se llaman Käsenockerl? ;)
ResponderEliminarMmmmm ¡esto tengo que probarlo! Muchas gracias por la receta, soy fan tuya aunque nunca comente :D ¡Besitos desde Dinamarca!
ResponderEliminarcuriosísimo,no lo había oído jamas
ResponderEliminarHola, acabo de descubrir tu blog y me hago seguidora.
ResponderEliminarTienes recetas que tienen muy buena pinta y que voy a hacer.
Si quieres pásate por mi blog.
Un abrazo.
*Pilar*
Begoña: ¿En serio? Jajajaja... yo tampoco habría sabido nunca para qué es!! Animate y me cuentas. Los Spätzle se pueden preparar muy bien también para acompañar a una carne en salsa. Por supuesto a un Goulasch por ejemplo, jeje, pero cualquier receta a la que nosotros le pondríamos arroz o puré de patata de guarnición. Ya me contarás! Un beso
ResponderEliminarPaula: Jajajaja... ¿cómo se te ocurre mirar comida a las 2 y sin comer? Eso no se puede :) Un beso
Manderley: Pues no tengo tantos, la verdad! Lo que más tengo son platos y platitos, jejeje... Pero tu tranquila, no nos echan, no ves la de cositas ricas que les preparamos?? ;) Un beso!
Marhya: Seguro que ideas alguna manera de hacerlos en casa. Ya verás que ricos con cualquier salsa que les pongas :) Un beso!
ResponderEliminarMiss Fidget: Jajaja, mira chica, yo ya con tanto nombre de las mismas cosas tengo un lío... pero se que en mi trabajo les llaman Spátzle, y con Oberösterreichisch hasta la médula ;) Besos!
Hola anónima Danesa! Muchas gracias por animarte a comentar. Hace mucha ilusión :) Un besote!!
Espe: Una de las cosas que más me gusta de vivir fuera es seguir descubriendo cada día recetas distintas, es una gozada :) Un beso
ResponderEliminarPilar: Muchísimas gracias, y bienvenida. Espero que te gusten las recetas y leernos por aquí y por allí! Un beso
Desde que encontré tu Blog que te sigo, esta receta está muy buena la conozco, probaré la tuya y te diré, encantada!
ResponderEliminarlacocinademariaeugenia.blogspot.com.es
Hace más de siete años viví en Roma durante una temporada y allí conocí a una chica alemana que los hacía buenísimos. Le pedí la receta pero la perdí y desde entonces tengo ganas de hacerlos. Creo que con esta receta tan bien explicada no tendré problemas en volver a saborearlos. Por cierto, creo que aquella chica los hacía a mano y no usaba ningún colador ni ningún otro utensilio. A ver cómo nos las apañamos.
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